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Cada página transcurre en un lugar del barco diferente: la sala del capitán, los camarotes, la cocina, la cubierta, … y en cada una de ellas hay una pregunta que sirve como disparadora para buscar qué se esconde detrás de las ventanitas. En la página de los camarotes, por ejemplo, se pregunta: “¿Por qué el camarote está en silencio?” y recién cuando se levantan las tres ventanitas de la página se puede observar que todos están durmiendo.
Los libros con ventanitas son muy comunes dentro de los libros para los más pequeños pero no todos incluyen dentro de la historia la necesidad de descubrir qué esconden. Muchas veces, levantar las pestañas se plantea como juego sin relación con la trama que plantea el libro. No es este el caso, en el que las preguntas dan sentido a que los chicos tengan que descubrir qué se esconde detrás de cada pestaña. Además la calidad del cartoné hace que sea un libro durable y que pueda resistir las sucesivas aperturas y descubrimientos de los chicos. Este título se integra dentro de una colección, en la que se encuentran los siguientes títulos:
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Ideas para el momento de leer el libro con los niños:
- Leer la pregunta que aparece en cada página y esperar a que los mismos chicos busquen dónde están las ventanitas. Usualmente, los libros con pestañas poseen una única por hoja. Sin embargo, este libro ofrece tres, lo que hará que sea un verdadero trabajo de descubrimiento para los chicos encontrar dónde hay una pestañita para levantar. - Una vez que han encontrado quiénes se esconden en cada página, volver a leer la pregunta para que los chicos la respondan. Por ejemplo, en la primera página que se pregunta “¿Tiene ayudantes el capitán”, estimular a que los chicos la respondan y que vayan nombrando cada uno de los animales que se esconden en las ventanitas: “¡¡Sí!! Lo ayudan el loro, el pato y el sapo”. - Al levantar cada nueva pestañita, puede nombrarse quién apareció y qué está haciendo o imitar el sonido que ese animal hace. Por ejemplo, en la página de la sala de máquinas al levantar la pestañita de los engranajes: “¡Uy! El ratoncito ayuda a hacer girar los engranajes”. - Cada ilustración tiene otros detalles que seguramente llamarán la atención de los chicos y los invitarán a dedicar un tiempo de observación. Es interesante detenerse, por ejemplo, en la sala de máquinas y observar todas las herramientas que aparecen. |
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